Requisitos de finalización
1. Lección 8. Las nuevas tendencias del arte de composición armenio en las décadas de los 60-70
1.6. Tigrán Mansurián
| En las últimas lecciones se habla frecuentemente del sistema de medios y modos de expresión creados en el siglo XX que ingresaron en la música nacional. Esa era la influencia de los representantes de la nueva escuela vienesa (A. Schoenberg, A. Weber, A. Berg), B. Bartok, Hindemit, Stravinsky y la nueva escuela polaca (K. Penderetsky). Se ha hablado también del hecho que muchos de los compositores armenios sintieron la necesidad de crear obras contemporáneas con valores artístico-musicales asimilando y utilizando sobre las bases nacionales los medios y la experiencia de estos compositores para expresar los acontecimientos tensos, dinámicos, a veces inhumanos, las desilusiones del siglo XX.
Este movimiento fue liderado por el joven compositor Tigrán Mansurián, que hoy es un compositor armenio conocido en muchos países del mundo. En la época de la que estamos hablando, siendo aún estudiante, Mansurián conseguía con gran pasión y mucho esfuerzo, los discos, las partituras de los compositores nombrados, lo que para aquellos días era una cuestión difícil. Haciendo escuchar en su entorno musical esas obras, demostrando con la experiencia creativa propia la necesidad de comprender y asimilar lo nuevo. Una demostración de ello fue su trabajo de graduación, la obra neoclásica “Partita” y la serie escrita en base a los “Cuatro hayrenner” (cuartetas) de Nahapet Kuchak.
Éste último, es un brillante ejemplo de leer con medios contemporáneos la poesía medieval. Tigrán Mansurián presentó lo nuevo de su estilo en distintos géneros de la música, sinfonía, ballet, música de cámara y coral. La música sinfónica y coral de Mansurián se presenta con tipos variados. De las obras más conocidas del autor se destaca el concierto para viola y orquesta en el que se manifiestan claramente las grandes posibilidades musicales de un Mansurián que domina hábilmente los nuevos medios expresivos.
Se escucha fragmento del concierto para viola y orquesta de T. Mansurián. Es conocida y popular la música para cine de Tigrán Mansurián. Transformándose en uno de los componentes importantes de las películas su música participa en la expresión de los estados psicológicos de los personajes y del clima y el ambiente general de la película. Se escucha una de las músicas de la película “Ktor me yerkink” (“Un pedazo de cielo”).
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